RANDAZZO ANUNCIO LA ESTATIZACION DEL SARMIENTO.

El ministro del Interior y Transporte de la Nación, Florencio Randazzo, anunció la estatización total de la línea de trenes Sarmiento, que une las cabeceras de Once y Moreno. Lo hizo durante una conferencia de prensa en la que se refirió ampliamente al hecho ocurrido en Once el sábado último, cuando chocó una formación y dejó un saldo de varios heridos.
Antes de anunciar la estatización del ramal, el funcionario nacional señaló datos en torno a la política de su ministerio en relación a los ferrocarriles.
"En agosto ampliamos los alcances de los controles, haciéndolos extensivos a todas las líneas", indicó Randazzo y agregó: "introdujimos controles aleatorios de alcoholemia y drogas".
Además, dijo que en el mes de julio se impulsó la "instalación de cámaras en las cabinas de los motorman para detectar conductas que puedan poner en riesgo la vida de los pasajeros y los motorman". Asimismo, señaló que "pese a un paro general, pudimos poner en todas las cabinas cámaras que pudiesen controlar responsabilidades".
Además, puntualizó que a partir de ahora se evaluará "a los motorman y realizará estudios y exigencias como los que se hacen a los pilotos de aviones comerciales. Esto va en favor de los trabajadores".
También anunció "cambios en los procedimientos de conducción. Se ha dispuesto que en el área metropolitana donde el motorman vuaja solo, el guarda debe trasladarse en la anteúltima estación para estar con él en el ingreso a las cabeceras".
Además, "las formaciones eléctricas deberán reducir velocidad a 5 km y detener a 0 km la velocidad 20 metros antes de que finalice el andén".
En cuanto al cuestionado motorman del tren siniestrado, Julio Benítez, calificó como "actitud repuidiable" la que tuvo "amenazando que se va a dormir. La empresa solo le aplicó un apercibimiento. Consideramos que una persona que conduce de esta manera tiene que ser sancionada con mucha dureza porque después es tarde para lamentarse".
Además, apuntó contra la empresa que realiza controles. "Es más grave aún que el sábado 19 de octubre, antes del siniestro, la empresa solo realizó controles de alcoholemia y no el resto, que determina si un conductor está en condiciones. Evitando hacerlo invocando un acuerdo gremial".
"¿Un acuerdo para evitar controles, entre la empresa y el gremio?", se preguntó.
"No me voy a dejar condicionar ni por gremialistas ni por empresarios", dijo también.